La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, cree que "el capitalismo deja margen suficiente para la renovación" y que el sistema financiero es más seguro tras la crisis económica, aunque ha calificado la situación actual de "mediocre", ya que a pesar del crecimiento de la economía mundial en un promedio del 3,5%, en el mismo ritmo al cual creció en promedio en los últimos 20 años, "no se está creando los puestos de trabajo necesarios".

La creación de empleo es insuficiente
"La insuficiente creación de empleo se distribuye de una forma que no responde a las necesidades. Tampoco está estimulando la productividad, y lo sorprendente es que los países emergentes, que podrían estar creciendo mucho más aceleradamente, no lo están haciendo”, ha reflexionado Lagarde en una extensa entrevista con El País.

La austeridad no es la causa del crecimiento insuficiente
La directora del FMI ha rechazado que este crecimiento insuficiente tenga relación con los programas de austeridad adoptados en muchos países tras la crisis de 2008. En su opinión, el debate entre austeridad y crecimiento es falso. “No se excluyen entre sí. Es posible tener disciplina fiscal y un crecimiento fuerte”, afirma.

El capitalismo deja aún margen para la renovación
Lagarde está convencida de que "el sistema capitalista deja margen suficiente para la renovación" y valora positivamente "las fuerzas de los mercados", pero añade que deben trabajar "en un entorno normativo que proporcione a los gobiernos las herramientas necesarias para reaccionar ante las desigualdades”.

La tecnología y las finanzas potencian la desigualdad
Sobre los posibles causantes de la desigualdad: tecnología, comercio internacional, sistema financiero y las políticas gubernamentales, Lagarde cree que los factores que más la potencian son la tecnología y "el mundo de las finanzas, donde se concentran recursos inmensos en manos de un pequeño grupo".  También, añade,  "la cultura, sobre todo cuando la cultura limita las oportunidades de las mujeres" Sin olvidar "la corrupción, por supuesto”.