Federico Jiménez Losantos e Iñigo Errejón.



Tras la tormenta mediática que supuso la escenificación de la entrada en el Congreso de Podemos, el número dos de la formación, Iñigo Errejón, analizó los comentarios recibidos en una tribuna publicada en El País, el pasado sábado, con el título Desprecio patricio. En dicho texto, Errejón aseguraba que en dichas “reacciones airadas” se escondía un “desprecio patricio por lo que se considera la entrada de una turba ruidosa y folclórica en un templo de la racionalidad y los procedimientos congelados”.

“Una irrupción plebeya que no es reducible a la cuenta estadística en términos de posición económica, sino de los que hasta ese momento estaban excluidos de los lugares del poder, hasta el punto de que su llegada a las instituciones se perciba con espanto”, señalaba Errejón, quien añadía que “cada expansión democrática ha sido siempre un ‘jaleo innecesario’ a decir de los que mandan”.

Su “tribuna plutocrática de El País” ha sido duramente contestada por Federico Jiménez Losantos desde la competencia, en su columna de El Mundo, bajo el título El niñato plebeyo, donde acusaba a Errejón de “despotismo tercermundista” que “chapotea en la cursilería y ni siquiera Iglesias es tan cursi como este niñato empeñado (…) en separar a los diputados entre ‘patricios’ y ‘plebeyos’”.

Losantos tacha a Errejón de Espartaquito eN incide en el asunto del bebé de Bescansa.
“El Espartaquito invertebrado dice que los ‘patricios’ están horrorizados por la entrada de los ‘plebeyos’ que escandalizarían con sus rastas y sus bebés de atrezzo a la gentuza de traje y corbata, a las diputadas y madres que visten el práctico dos piezas y que (…) dejan a los niños en la guardería”.

“No sé si es porque yo sí soy de pueblo y de origen social modesto o porque soy liberal, pero odio a los niñatos progres que utilizan términos del Antiguo Régimen o del esclavismo para referirse a los ciudadanos, sean pobres o ricos de nacimiento”.

Y añade que en España no hay “ni súbditos ni esclavos” hasta que los “pijiprogres” a los que representa Errejón "se hagan con el Poder".

Losantos concluye su columna haciendo una ennumeración de lo que él considera “corrupción patricia” de Podemos, incluyendo “la beca de investigación que Errejón cobraba sin investigar en Málaga” o “el medio millón de dólares” que se llevó Juan Carlos Monedero de Venezuela.
[O] los nueve millones de euros que Irán dio a Iglesias antes y después de Podemos. ¿Hay alarde mayor de patricio alfa que el de Iglesias poniendo de número cuatro por Madrid a su novia y de 7 a su ex-novia? ¿Algo más señoritil que Rita Maestre, ex de Errejón, asaltando en sujetador una vil capilla católica?