Cambiar de residencia suele ser algo que recordemos con cariño o todo lo contrario dependiendo muchas veces de cómo se nos haya dado la mudanza.

Para llevarla a cabo, hay diferentes opciones, la más cómoda, pero la más cara, es la de contratar los servicios de una empresa particular. Si el problema es el dinero, lo más rentable es que alquiles una furgoneta y te prepares para ´currar´. Para minimizar ese trabajo, te contamos una serie de recomendaciones: