Famaztella, la sociedad limitada con la que el expresidente José María Aznar y la exalcaldesa de Madrid Ana Botella explotaban los derechos de propiedad intelectual que generaban los libros, discursos y conferencias, no registró facturación alguna en 2015 según informa el diario El País. Su cifra de negocio fue cero, frente a los 267.608 millones del año anterior, según las cuentas presentadas en el registro Mercantil, en las que consta que la única actividad fue la de inversiones en empresas. No obstante, la empresa familiar Aznar-Botella obtuvo un beneficio en el ejercicio de 86.615 euros, un 70% menos que el ejercicio anterior.

Inversiones por 2,69 millones

Aunque el objeto social de la compañía sigue siendo la "explotación de los derechos de propiedad intelectual en todas sus manifestaciones", la única actividad que se refleja en el ejercicio de 2015 son inversiones en acciones. En concreto, la suscripción de 352.112 acciones de una firma llamada Spider Cloud Wireless, por valor de 250.000 dólares (224.500 euros al cambio actual). "Se encuentran depositadas en la entidad Mobile Opportunity Investors, con domicilio en Los Ángeles", explica la memoria de las cuentas. Al margen, tiene inversiones en otras compañías, que junto a las acciones americanas suman 2,69 millones de euros.

Inspeccionada por Hacienda en 2013

 La empresa de Aznar ha puesto fin a sus litigios con Hacienda, tal y como consta en la documentación presentada: "En el presente ejercicio no existen comunicaciones recibidas en la sociedad de las autoridades fiscales (...), referentes a faltas de cumplimiento de la legislación vigente o diferencias observadas por dichas autoridades".

 La empresa del ex presidente y la ex alcaldesa estuvo en el centro de la polémica cuando trascendió que Aznar tributaba por sus actividades personales (conferencias o artículos) a través de ella, y no en su declaración del IRPF. La Agencia Tributaria le abrió en 2013 una inspección sobre sus declaraciones de 2009 y 2010. Después de que se hiciera pública la investigación de Hacienda, Aznar manifestó que se habían aclarado las 'discrepancias' y que se cerró el expediente con un acuerdo "de conformidad por las dos partes". No especificó si tuvo que abonar pagos pendientes o recibió sanciones.