El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri ha aprovechado la tradicional comida con los periodistas previa a la Junta General de Accionistas, que se celebra este viernes, para aclarar ciertos aspectos del rescate del Gobierno a la entidad. En este sentido ha querido subrayar que, a cambio de los 18.000 millones que recibieron del Estado, la Unión Europea les obligó a una "reestructuración durísima" de la plantilla, con cierre de sucursales y limitaciones en sus operaciones.

A finales de este año finalizan estas restricciones y se abrirá una nueva etapa en la que podrán competir en igualdad de condiciones. Según subrayó Goirigolzarri seguirán funcionando igual pero, una vez liberados del "corsé" de las restricciones, explorarán nuevas oportunidades de crecimiento.

Uno de los sectores en los que ven posibilidades es en la promoción inmobiliaria. "Es un sector que no hay que demonizar: es muy importante para la economía española", dijo. 

Tras subrayar la necesidad de huir de los "excesos del pasado", insistió en las oportunidades que abre el sector del ladrillo. Eso sí, no esperan que este tipo de operaciones sea muy relevante en 2018 dado que, según sus planes, no se pondrá en marcha hasta el último trimestre del año.

100 millones de ahorro 

Bankia ha logrado ahorrar cerca de 100 millones de euros al anticiparse al decreto del Gobierno para la devolución de lo cobrado de más por las cláusulas suelo de las hipotecas. Según ha indicado Goirigolzarri, tras su experiencia con las preferentes, tenían clara la necesidad de dar una "solución ágil, rápida y gratuita" para los clientes que, al mismo tiempo, sería beneficiosa para los accionistas por el ahorro de los gastos judiciales y de intereses. En el caso de las acciones de la Oferta Pública de Suscripción (OPS), anticiparse a la sentencia les ahorró 400 millones.

En total, Bankia ha afrontado gastos de casi 5.000 millones por la salida a Bolsa, las preferentes y las cláusulas suelo.

Mensaje a FG

"Esto no tiene nada que ver con la pólvora del rey", dijo en referencia a las críticas de su antiguo jefe en BBVA, Francisco González, que llegó a compararle con Papá Noel. Además,  puntualizó que, si estuvieran en pérdidas, aún se podría decir, pero no cuando la rentabilidad de Bankia está por encima de la media del sector.

En relación a la sentencia del Tribunal Supremo sobre la devolución de los gastos de las hipotecas, Goirigolzarri matizó que, aunque la entidad no está aludida por la sentencia, su espíritu sí se está aplicando. En la hipoteca sin comisiones, por ejemplo, se comparten los gastos entre el cliente y la entidad con excepción del impuesto de actos jurídicos documentados, que es responsabilidad del prestatario.

"Yo no creo en la banca pública", defendió. Aunque dijo que la actitud del FROB y del Gobierno en estos cinco años ha sido "impecable" no contempla una Bankia nacionalizada a futuro. Para subrayar su posición recordó que cuando fue nombrado presidente de BFA no conocía a ninguna de las 30 personas que formaban parte del consejo. "Eran representantes de los partidos políticos, de las patronales y los sindicatos pero ninguno había trabajado en banca y eso nos condujo a lo que nos condujo y que todos sabemos".

Fusión con BMN

Sobre la fusión con Banco Mare Nostrum (BMN), ya autorizada por el FROB, calcula que se hará en el último trimestre del año, después del verano. Goirigolzarri minimizó el impacto que podría tener la fusión entre el personal de ambas entidades. "El nivel de solapamiento es ínfimo", comentó ya que en los sitios en donde BMN tiene más presencia (Murcia, Granada y Baleares), la de Bankia es muy poca.

Goirigolzarri se mostró muy satisfecho con los resultados del pasado año, de los que dará detalles este viernes en la Junta, pero, sobre todo del trabajo de los últimos cinco años, que les ha permitido superar sus problemas y aumentar los niveles de satisfacción de sus clientes. "Estamos antes un nuevo ciclo y lo vemos con optimismo".