La muerte de Rita Barberá ha sido aprovechada por muchos para buscar no se sabe bien qué tipo de rédito político. Es curioso como a la senadora y ex alcaldesa de Valencia, comunidad autónoma donde la corrupción, visto lo visto en diferentes sedes judiciales, parece haber campado a sus anchas, y cuyo propia partido está siendo objeto de pesquisas -también en otros ámbitos-, fueron sus propios compañeros los que, de una u otra manera, le dieron la puntilla profesional, hasta convertirla en una especie de apestada a la que se intentaba eludir de todas las formas posibles. 

Barberá murió en Madrid después de declarar ante la justicia. Pero su caída política la pergeñaron, fundamentalmente, sus ex compañeros de partido que la situaron en un escalafón similar al de Luis Bárcenas, es decir, otra innombrable, tal y como puso de manifiesto Pablo Casado apenas unas horas antes del óbito, que en comparecencia ante los medios no pronunció siquiera el nombre de una cofundadora de la génesis AP, poderosa en Valencia y con voz y voto en Génova.  

Veneran y denuestan

Sin duda alguna, quienes antes la denostaron y ahora la veneran, lo hacen por los mismos motivos, es decir, perseguen algún tipo de beneficio personal o colectivo en términos populares

Estos vaivenes, los dimes y diretes y el paripé que muchos han hecho en torno a la figura de Rita Baberá, viven este domingo un nuevo episodio con la publicación por parte de 'El Mundo' del presunto último SMS que la ex regidora envió pocas horas antes de fallecer a un alto cargo del ministerio del Interior.

Literamente, incluyendo faltas de ortografía, dicho mensaje dice lo siguiente:

"Simplemente recordarte la nueva carta de ameneza de muerte que he recibido. Esta vez me dan de plazo hasta el dia 1. Bss. Espero verte dias despues. Rita".

A partir de aquí se ha abierto la caja de las especulaciones, incluidos los sucesos, algunos extraños, que han rodeado algunos casos de corrupción que, con diferente profundidad e intensidad, afectan al PP, y de lo que también hemos dado cuenta en ELPLURAL.COM.

Este último SMS que se atribuye a Rita Barberá ha vuelto a situar su nombre entre las tendencias de este domingo, aunque para muchos tuiteros, un asunto como el de ese posible último mensaje que bien podría formar parte del guion de una película hollywoodiense, no deja de ser anecdótico e, incluso, es tratado con cierta ironía. 

Al margen del humor, de la ironía, también del mal gusto, lo cierto es que este SMS todavía dará mucho de qué hablar. No obstante, también se cae en la cuenta de que es probable que, de nuevo, alguien haga del mensaje más política con un único propósito: buscar un beneficio personal o de partido. Y todo esto sin descartar más mensajes, cartas y otros elementos 'sospechosos'.