La tarde este sábado, el ex secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha vuelto a la carretera para seguir recorriendo las agrupaciones de su partido. Tras su paso por Valencia hace un par de semanas, hoy su periplo le ha llevado hasta la localidad asturiana de El Entrego.

Al margen del lugar donde ha celebrado el encuentro con militantes, en la tierra del presidente de la gestora, Javier Fernández, que muchos han visto como intencionado, Sánchez ha reclamado un PSOE unido y situado enfrente de la derecha, en el que no sobre nadie y en el que, si se quiere, se redefina el proyecto socialista, pero desde una dirección elegida por las bases.

Según sus palabras dirigidas a cientos de personas que han dado cita en el lugar, los organizadores hablan de 1.500, "para coser el PSOE la mejor aguja e hilo es la voz y el voto de la militancia, no la de cuatro metidos en un despacho", que como había hecho con anterioridad en Xirivella y Sueca (Valencia) ha vuelto a reclamar la celebración cuanto antes de primarias y un congreso federal.

El exlíder del PSOE, desde el corazón de la cuenca minera asturiana, ha retomado sus encuentros con socialistas, con el propósito de "reconstruir" el partido y comprobar si tiene los apoyos necesarios para presentarse a las primarias. 

Curiosamente, a su llegada al parque de La Laguna fue recibido con la canción "Color esperanza", de Diego Torres, la misma que en su momento utilizó Esperanza Aguirre en alguna de sus campañas electorales a la presidencia de la Comunidad de Madrid.

Más allá de anécdotas, Pedro Sánchez ha dicho a los presentes que retrasar la convocatoria del congreso "no beneficia a ningún socialista, y sí a Mariano Rajoy".