El Pleno del Congreso se celebraba hoy con la mirada puesta en las críticas de ayer de varios diputados a los supuestos “malos modos” de los dirigentes de Podemos. Por ello, los portavoces morados se han cuidado mucho de hacer sus preguntas al Gobierno con sumo respeto. Lo que se han encontrado enfrente es a negativa del Ejecutivo a contestar a sus preguntas y alguna palabra más alta que la otra.
Lo ha vivido Pablo Iglesias, a quien el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, le ha remitido a hablar por teléfono si quiere explicaciones sobre el escándalo del piso de la Guardia Civil adjudicado al director de la DGT. Y lo ha experimentado la portavoz Irene Montero en un cara a cara con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien en lugar de dar explicaciones por las grabaciones del CNI al rey emérito, ha preferido acusar a Podemos de preocuparse más por “los que exaltan el terrorismo que por los que lo sufren”.
Con esta proclama, Sáenz de Santamaría se ha negado a responder hasta ocho preguntas de Montero sobre las filtraciones “al tertuliano Eduardo Inda” sobre las grabaciones que el CNI realizó a Juan Carlos I. Los audios han podido escucharse ahora, pero fueron realizados hace 25 años, “cuando usted estaba en primero de infantil y yo en primero de carrera”. Una apelación a la diferencia de edad que ha sido duramente criticada por Pablo Iglesias.
“No sé si tiene usted menos palabra o menos discurso”, ha llegado a decir la vicepresidenta, alegando que cuando se publicaron las grabaciones, Podemos no les prestó atención y ahora preguntan por ellas. “Su grupo parlamentario hoy ha instaurado el seudoparlamentarismo”, ha añadido Sáenz de Santamaría, para después asegurar que el relato de “conspiraciones” que ha hecho Montero “parecen las crónicas de una asamblea de Podemos”.
